125 g de almendras previamente hidratadas durante toda la noche.
1 l de agua mineral o purificada.
1 cdita. de extracto de vainilla.
1 pizca de sal marina.
Para endulzar: 1 cucharada de miel o 3 dátiles sin carozo.
Retirá el agua de remojo de las almendras, enjuagalas y colalas.
Licuá por unos minutos junto con el agua y el endulzante elegido, hasta desintegrar las almendras completamente.
Colá con un lienzo o bolsita de leche vegetal presionando con las manos para obtener todo el liquido posible.